Cuando se jubila un profesor le suelen regalar una placa, un reloj, un bolígrafo o cosas parecidas. En mi caso (Germán Tomás), además de dos placas -del AMPA y de los profesores actuales y unos cuantos antiguos-, mis compañeras y algunas excompañeras de Departamento me han regalado una maqueta del laboratorio de Química, que montamos con Javier Lafalla en 1985. Las "culpables" son, por riguroso orden alfabético, Carmen Bello, Elena Forcén, Arantxa Isasi, Ana Puerto y Ruth Vicente.
Como se puede ver en las fotos, está hecha a escala (34 x 28 x 18 cm) y es de un realismo absoluto, hasta en los colores de las mesas, el suelo, los posters de las paredes, el material que hay en las mesas, etc. Un regalo increíble que me encanta y que a la vez me emociona cuando lo miro. Además, lo ha hecho una exalumna (Cristina Martínez), que, aparte su actividad laboral como veterinaria, tiene la artesanía por afición, así que todo queda en casa.